Control Cero. (Capítulo.2)

En la pantalla de mi ordenador se podía ver un archivo de texto el cual contenía un enunciado muy llamativo para nosotros, "Sistema de pagos con tarjetas multidireccional". Aquella pista nos hacia pensar que estábamos en lo cierto. Mirando detenidamente un poco el archivo de texto vimos como éste hacia referencia a una licencia de software. Por las lineas que contenía pudimos deducir que el proyecto de las tarjetas ya estaba bastante avanzado.

Aun no sabíamos muy bien como iba a ser, ni para cuando sería público.
Pensamos que podríamos aprovechar ese archivo para hacernos un duplicado de la licencia. De esta manera si conseguíamos acceso a la red de la empresa lo primero que haríamos sería buscar el software de gestión de los seriales de dichas tarjetas.


Cuando nos quisimos dar cuenta se nos echó la noche encima. Hicimos un pequeño descanso para cenar y tomar fuerzas. Llevábamos un día bastante ajetreado. Sin embargo tanto a Kevin como a mí nos gustaba más la noche que el día, era cuando más  a gusto nos encontrábamos con el ordenador.

-Mira lo que he encontrado en este foro. Parece que España no es el único que quiere unificar todas las tarjetas con chip. -Kevin giró el ordenador y me lo enseñó.

-Increíble tío, guarda esa página en favoritos, es posible que la necesitemos más tarde.

-Si, además han publicado algunos enlaces interesantes. -

-Yo tengo aquí un foro donde venden una máquina para esas tarjetas. Creo que si compráramos una éstas podríamos investigar un poco más. Lo único malo es que tardará un mes en llegar. -Ahora era yo quien estaba impaciente por tener la mayor cantidad de información posible.

Se me había olvidado por completo el detalle de que me dejé el CD junto al muro de la DGT. A fin de cuentas si lo encontraban no podrían ver mucho más que un cd con algunos programas para sniffar el tráfico de los ordenadores. Aun que eso por otra parte podía ser un punto de desconfianza. Si alguno de los vigilantes que salió detrás nuestra le diera por mirar en el CD y a éste le diera por ver en Google que eran esos programas, es posible que nos metiéramos en lío.

-¿Qué piensas Leo?. -Me preguntó Kevin al ver tan metiendo en mi "mundo".

-Nada, ¿crees que habrán encontrado el CD que me djé allí?.

-No temas por eso amigo mío, en caso de que lo encontraran y de que el que lo encontrara fuera el mayor experto en seguridad informática, jamás se molestaría tanto como para perseguir una pista de nuestro paradero. Esa gente apenas gana 1000€ y por esa cantidad nadie se mancha las manos.


La verdad es que la contestación que me dio kevin me dejó prácticamente sin palabras. -cierto .- le respondí olvidando de nuevo ese detalle y volviendo al ordenado.

Al día siguiente recién levantados nos pusimos a desayunar mientras veíamos las noticias como era constumbre. Y al igual que cada mañana, nada nos llamó la atención. A excepción de nuestros ordenadores que estaban haciendo un ruido infernal por culpa de los ventiladores. Los dejamos toda la noche encendido con la intención de poder contactar con alguien que tuviera una replica de la máquina de las dichosas tarjetas.

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